viernes, 18 de febrero de 2011

LA FE ES LA SUSTANCIA DE LO QUE DESEAN

Aún los estudiantes que más disciernen y los más contemplativos no han atado una parte fragmentaria de Mi Naturaleza y capacidad a través de ellos para atraer adelante la manifestación. 

Sin la materia prima como carbón, hierro y madera; lana, seda y pelaje, no tendrían una manifestación de una forma tridimensional que haya bendecido a la humanidad en sus necesidades esenciales de vida, confort y lujo. 

Cuando los estudiantes reciben la Idea Divina desde la Presencia, el plano de algún deseo, diseño o forma por medio de la cual se va a enriquecer la belleza de la Vida, la suya propia o la Universal, debe proveerse la sustancia, la materia prima de donde, de acuerdo a la eficacia de sus facultades diseñadoras, el resultado será el producto final. Llegamos, entonces, al punto de posiciones gastadas que la humanidad ha disfrazado durante siglos. 

LA FE ES LA SUSTANCIA DE LAS COSAS QUE SE ESPERAN, LA EVIDENCIA DE LAS COSAS QUE NO SE VEN. El deseo y el diseño liberado a la conciencia intelectual desde la Presencia representa la Cosa, que se espera. Vemos, entonces que la Fe es la materia prima, es la SUSTANCIA REAL que emana desde la corriente de vida que trabaja en la manifestación en cooperación con Mi Rayo Cósmico y que esa sustancia se convierte en la fuerza electrónica que llena los pensamientos y sentimientos forma. 

Saint Germain, en Sus esfuerzos por impresionar este punto en la mente de los estudiantes, define FE de la siguiente manera; LA FE ES UN PODER CONQUISTADOR EMANANTE”. La palabra “emanación” entraña radiación desde el centro hacia fuera. 

.. Cuando estas dos frases se unen, dan una tremenda bendición para la precipitación.
La Fe es la sustancia que emana desde algún centro, y la sustancia así emanada se convierte en la evidencia o manifestación de la idea no vista. 

Me maravillo que la humanidad haya parloteado tanto tiempo acerca de la Fe, sin realizar Su palpabilidad; Su tangibilidad; Su moldeabilidad y Su Presencia esencial antes que la manifestación pueda darse. 

¿Cómo diremos, que la Fe emana del tímido ser externo? Por medio de correlacionar la mente con la realización de que la Idea Divina viene de Dios, y presiona a través de la conciencia intelectual como un mensaje del Padre al Hijo de que más belleza es el diseño de Dios por medio de la Mano del Hijo en este mundo. Luego, desengañando la conciencia humana una y otra vez de la indebida responsabilidad y conciencia de arrogancia de ser el hacedor, la acción y el hecho. 

Tenemos, así, la Mente consciente aceptando el deseo del Padre dentro del Cuerpo Mental. Debemos entonces devolver la Naturaleza de la Fe al Poder de la Presencia como el único Poder que puede actuar, y esta propia rendición da inicio a la radiación de Fe que es una liberación de la sustancia desde la Presencia; la cual acomoda el ser externo y realmente atrae, integra y precipita la Luz Electrónica, la cual conforma la vestidura de la manifestación. 

El amor del ser exterior por la Presencia permite el Poder Conquistador Emanante desde la Presencia, el cual se convierte en la cualidad conocida como FE que fluye a través del individuo. 

Por supuesto, cuando se está familiarizado en Mi Ser como Foco de Dios Definido e Inteligente de esta Cualidad puede acoplarse la propia invocación a Mí con su devoción a la Presencia, y la Fe de Mi Rayo Cósmico fluirá adelante libremente. 

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